martes, 27 de noviembre de 2007

Matrimonio (Soledad en compañía)

Después de mucho tiempo, ya hacía varios años que estaba instalado acá en Bs.As., conocí a una persona, con la cual después de un año de novio, decidimos vivir juntos.

Un año mas tarde, el día en que nos estábamos yendo de vacaciones nos dan la noticia que estaba embarazada, la pregunta de todos era siempre: “No se cuidaron?” y ahí comenzaba la explicación… sobre algo que, era común en su flia., que era el de quedar embarazada durante el periodo, después de esto y ya volviendo de las vacaciones, dije: “si te queres casar… fíjate en que fecha”, ella: “nunca pensé en que te ibas a casar”, yo:“siempre dije que no me iba a casar mientras no hubiese hijos”.

Una vez fijada la fecha…, no quería casamiento por iglesia, unos de mis amigos, cura, mano derecha de un obispo, no podría venir, como tampoco quería fiesta, solo una reunión intima, pero paso que de un día para el otro, entre ella y el padre armaron una fiesta para más de ciento cincuenta personas, torta de cinco pisos, limousine y no se cuantas pavadas mas.

En noviembre nació Aixa, presencie el parto… a causa de no tener dilatación, existía la posibilidad de ir a cesárea, de ser así, también estaría presenciaría.

A medida que pasaba el tiempo… la gorda crecía y la madre cambiaba… y cambiaba cada día mas, al poco tiempo me encontré que tenia familia, pero estaba totalmente solo, a medida que pasaba el tiempo, eran mas los días por semanas que dormía en la habitación de la gorda, y los que no, ella se acostaba cuando yo me levantaba para ir a trabajar y ni que hablar de tratar de hacer un mimo o una caricia, eso era recibir un gruñido y/o ladrido.

Muchas noches, en que yo salía mas temprano del trabajo, viajaba a buscar la gorda a la casa de sus padres, volvía, preparaba la cena, única comida diaria que podría tener en familia y después a dormir… casi siempre solo.

Muchos fueron los sábados que luego de trabajar, si es que me tocaba, volvía a mi casa y estaba solo hasta alta horas de la noche. Los domingos luego de levantarme salía a comprar el diario, facturas, me preparaba el desayuno y me sentaba a desayunar… solo… porque ella se amanecía a las tres de la tarde o mas, o sea que el almuerzo familiar del domingo era a eso de las diecisiete aprox.

Muchos, e inclusos algunos amigos de su flia., eran los que decían: “sepárate…no podes seguir viviendo así” como también muchas veces dije: “no quiero repetir historias… no quiero que mi hija viva lo que viví yo… pero, realmente, no me están dejando opción”.

Siempre me lave y planché mi ropa, no me molestaba, a parte de ser bastante hincha con la ropa de vestir, lo veía también como una ayuda hacia los quehaceres domésticos.

Yo…, amante de los fierros, si bien no soy de ir a ver carreras de autos, etc. a excepción de las de motociclismo internacional, pero si me gusta ir a las exposiciones, para ver los modelos de autos nuevos que están por salir, como así también los concept-car…, jamás pude ir en compañía… siempre solo, como “loco malo”.

Un día, yo, estaba destruido por el reciente aviso del fallecimiento de mi abuela, ella vino y me abrazó, le dije “hicieron falta muchos años y que mi abuela falleciera para que vos, por voluntad propia, vengas y me abraces.”

Hay muchas cosas mas que podría contar… pero seria extenderme demasiado, seria hacer un post demasiado extenso… podría enumerar regalo de varias chalinas, para ser exacto siete, cuando sabia que jamás usé porque no me gustan, remeras con bolsillos cuando sabía que las odiaba, servirme en un asado morcilla, cuando sabia que no solo no me gusta, si no que tampoco puedo comer por mi alergia congénita, y así un sinfín de etc. y etc. mas. Una vez le llegue a preguntar: “vos me lo haces a propósito???”, nunca contesto, así que creo que si… que era a propósito.

Una madrugada me despertó a los gritos por algo que estaba haciendo la gorda… como si yo tuviera la culpa, eran las dos de la mañana, y luego de una discusión, me volví a acostar…, tiritaba de frío, la mandíbula no podía dejarla quieta, transpiraba frío, me faltaba el aire, me dolía el pecho, durante mas o menos una hora sufrí todos los síntomas de un pre-infarto, no se en que momento me quede dormido, al día siguiente en lugar de despertarla con un beso como cada día antes de irme, la desperté y en lugar de darle un beso le dije: “el domingo me mudo”… lloró por cuatro días, la primera vez que la sentía llorar, el domingo me prepare un bolsón y me fui…, después me vengo a enterar que la separación ella la tenia planeada por mas de cuatro meses!! Mi pregunta fue: para que lloro, para que hacer tanto circo… para que me casé???

Estoy seguro de tener mucha culpa de todo esto, estoy arrepentido de haberme casado, de haber abandonado un sueño por otro que tampoco tuve, pero no lo estoy de tener una hija, aunque no me hable, aunque no quiera verme, pero este es otro tema, el tema real es que siempre estuve solo y hoy después de casi cinco años de estar separado puedo decir que soy feliz, en mi soledad y que ya no sufro las ulceras de nervios.

SEAL

martes, 20 de noviembre de 2007

Edades


Leyendo el Blogger de, no solo una persona conocida, si no ya de varias, he encontrado cierta preocupación sobre el tema de las edades, en algunos casos por la edad de la persona en cuestión… en otras por la edad de tal o cual persona.

Como comúnmente se dice, y seguramente escuchado hasta el hartazgo, la edad que se tiene es la que siente el corazón… creo que este dicho es algo real… ya que yo, personalmente, no me siento con la edad que tengo, como tampoco la aparento… por lo menos eso es lo que dicen… ahora lo que no sé, es que si lo dicen porque realmente es así, o si será por la forma de joder que tengo, o lo dicen como para dejarme contento!!! Creo que esta última opción… es la más acertada!!!!! Ja, ja, ja, ja

A su vez esto hizo que viniera a mi mente un recuento sobre las edades de personas con las que he salido y en la mayoría de los casos… siempre fueron mayores que yo… algunas veces en meses… otras en años… y en algunos casos en décadas.

Esto, sin lugar a dudas, y de acuerdo a mis conocimientos de los años cursado en licenciatura de psicología, seguramente ha sido por la gran escasez de cariño, del sexo opuesto, durante mi crianza.

Pero a medida que los años pasan, uno va cambiando… y va superando etapas, hay etapas en que uno busca salir con gente mayor y otras etapas en que busca gente de la misma edad, y otra en que busca gente menor… entiéndase como menor y/o mayor a una relación algo relativamente normal, tampoco como el caso renombrado no hace mucho, de una señora de ochenta y pico con uno de veinte y pico o el caso en que muchas veces suele ocurrir de un señor mayor con una persona que puede llegar a ser su nieta o bisnieta.

Sabemos que en el amor no existe la edad… pero también creo que debe haber una cierta coherencia..., creo que cuando hay amor verdadero la edad no importa, y en este caso, creo que la diferencia de edad no se nota demaciado..., el tema pasa pòr la incoherencia, cuando las edades de una "pareja", es mas por alguna razón de conveniencia y/o psicológica, de una o de ambas partes o de aquellas persona mayores que se dedican a encarar pendex´s para llevarla y/o mostrarlas como trofeos.

Muchas veces pienso e intento meterme en la cabeza de una persona mayor para saber que pasa por su mente cuando intenta salir con una persona mucho… pero mucho… mas chica, como en los casos nombrados mas arriba, pero específicamente en el hombre, no se…, pienso que ese día…, se habrá levantado con mucho optimismo se creerá que es lo mas TOP del mundo…, se habrá levantado creyendo que es un ganador y que ninguna mujer se le puede resistir..., se creerá que por ser un señor mayor, las mujeres deben darle bola…, o por que tiene plata… o porque… o… etc., etc.…. Y después se enojan cuando le dicen “Viejo Verde”

Me encanta cuando, un hombre sale con una mujer mucho más joven y va algún restaurante o a otro lugar público, siempre hay alguien que le hace referencia a la persona que tiene al lado como “su nieta”… me encanta como se le transforma la cara… como se le nota la bronca… ahora…también le preguntaría porque te enojas, si te la das de pende-viejo y sabes que no estas para eso… aguántatelas!!!!

Aguántate que todo el mundo te mire cuando entras a un lugar publico, pero no porque estés bien vestido…, ni porque seas un guacho bárbaro por salir con una pendex, si no por hacer el ridículo. Y a la pendex… la van s despellejar… lo primero que, por lo gral., van a decir que es un “gato” y/o que está con el vejestorio por dinero, en el caso en que la mayor se una mujer… es, mas o menos lo mismo, nada cambia.

Que se yo… no se… por lo menos así pienso yo…, quizás algunos de ellos me diga que estoy equivocado, que no es tan así… pero hasta ahora no he conocido nadie que se encuentre en esa situación!!!!


SEAL
Nota: (21/11) Modifiqué un parrafo, porque quizas no se entendia bien... igualmente aclaro que no estoy en contra de las parejas en las que hay mucha diferencia de edad y hay verdaderamente amor.

jueves, 15 de noviembre de 2007

EL BAMBÚ JAPONÉS

Nací y me crié en una ciudad, no quiero decir pueblo, porque si alguien de allá lee… se va a ofender y va a decir… “Como pueblo… Ciudad”… en realidad tienen razón es una ciudad… con la mentalidad de pueblo!!

Es una ciudad en donde hasta no hace mucho no existían los semáforos… es un lugar en donde toda la gente se mueve en bicicletas, ciclomotores, auto, etc., recuerdo hace algunos años atrás…, diría que casi todos los años… venia alguna persona y creaba un empresa de colectivo… al principio, mientras que era la novedad… estaba todo bien… pero a los pocos meses… la empresa de transporte terminaba haciendo el recorrido solo los domingos que eran los días en que la gente visita a los familiares que ya se fueron y que descansan en el retirado cementerio, para al final… dicha empresa terminara en banca rota por falta de pasajeros.

En mi ciudad/pueblo… en donde la actividad principal es el campo, es motivo por el cual mucha gente, y que, aunque haga muchos años que viva en la gran ciudad, dentro de lo cual me incluyo, seguimos hablando con dichos, versos,… y montón de cosas mas que son común en el campo, es que nos criamos escuchando a la gente y para nosotros es moneda corriente.

Entre los dichos que generalmente suelo decir está el que dice que: “El gaucho tiene dos tiempos y si lo dejan… tres”… o sea… soy una persona que le gusta ir despacio… pero a paso firme…, analizando los pro y contra de cada decisión a tomar… cuando tomo una decisión es porque la estuve rumiando un millón de veces…

Esto me hace acordar, a algo anónimo que, alguna vez me enviaron vía email y lleva el mismo titulo de este post.

”No hay que ser agricultor para saber que una buena cosecha requiere de buena semilla, buen abono y riego.

También es obvio que quien cultiva la tierra no se detiene impaciente frente a la semilla sembrada, y grita con todas sus fuerzas: ¡Crece, maldita seas!

Hay algo muy curioso que sucede con el bambú y que lo transforma en no apto para impacientes: Siembras la semilla, la abonas, y te ocupas de regarla constantemente.

Durante los primeros meses no sucede nada apreciable. En realidad no pasa nada con la semilla durante los primeros siete años, a tal punto que un cultivador inexperto estaría convencido de haber comprado semillas infértiles.

Sin embargo, durante el séptimo año, en un período de sólo seis semanas la planta de bambú crece ¡más de 30metros!

¿Tardó sólo seis semanas crecer?

No, la verdad es que se tomó siete años y seis semanas en desarrollarse.

Durante los primeros siete años de aparente inactividad, este bambú estaba generando un complejo sistema de raíces que le permitirían sostener el crecimiento que iba a tener después de siete años.

Sin embargo, en la vida cotidiana, muchas personas tratan de encontrar soluciones rápidas, triunfos apresurados, sin entender que el éxito es simplemente resultado del crecimiento interno y que éste requiere tiempo.

Quizás por la misma impaciencia, muchos de aquellos que aspiran a resultados en corto plazo, abandonan súbitamente justo cuando ya estaban a punto de conquistar la meta.

Es tarea difícil convencer al impaciente que sólo llegan al éxito aquellos que luchan en forma perseverante y saben esperar el momento adecuado.

De igual manera es necesario entender que en muchas ocasiones estaremos frente a situaciones en las que creemos que nada está sucediendo.

Y esto puede ser extremadamente frustrante.

En esos momentos (que todos tenemos), recordar el ciclo de maduración del bambú japonés, y aceptar que en tanto no bajemos los brazos -, ni abandonemos por no "ver" el resultado que esperamos-, si está sucediendo algo dentro de nosotros: estamos creciendo, madurando.

Quienes no se dan por vencidos, van gradual e imperceptiblemente creando los hábitos y el temple que les permitirá sostener el éxito cuando éste al fin se materialice.

El triunfo no es más que un proceso que lleva tiempo y dedicación.
Un proceso que exige aprender nuevos hábitos y nos obliga a descartar otros.

Un proceso que exige cambios, acción y formidables dotes de paciencia.

Tiempo... Cómo nos cuestan las esperas, qué poco ejercitamos la paciencia en este mundo agitado en el que vivimos...

Apuramos a nuestros hijos en su crecimiento, apuramos al chofer del taxi... nosotros mismos hacemos las cosas apurados, no se sabe bien por qué...

Perdemos la fe cuando los resultados no se dan en el plazo que esperábamos, abandonamos nuestros sueños, nos generamos patologías que provienen de la ansiedad, del estrés... ¿Para qué?

Te propongo tratar de recuperar la perseverancia, la espera, la aceptación.

Si no consigues lo que anhelas, no desesperes... quizá solo estés echando raíces....”

SEAL

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Brothers & Sister

Luego de la separación de mis padres… mi único hermano…, hasta el momento, se mudo con mis abuelos, yo seguí viviendo con mi madre, tampoco es que se mudo a otra ciudad… estábamos casa de por medio, esto hizo que, con mi hermano mayor, no conviviera… bueno, casi… conviví quince días, fueron los primeros quince días del mi primer semestre en Ingeniería Electrónica en la ciudad de La Plata, creo que esos quince días fueron mas que suficientes para saber que era mas que imposible convivir con el.

A los dos años de estar viviendo solo con mi madre, esta se decide juntarse, así que de ahí en más…, comencé a tener padrastro, volví a tener, como quien diría un papá, esta persona no era ajeno, ni desconocido para mi…, pero junto con el, vino nuestra mudanza… primero a Bragado por un año, luego a Olavaria, por otro año… para luego volver nuevamente a Bragado.

Ya instalados nuevamente en Bragado… a los seis meses, nace mi otro hermano, por parte de madre y uno de los que crié, o sea…, que hasta ese entonces, en mi vida… había sido hermano menor… después fui hijo único… y ahora pasaba a ser hermano mayor… o sea… todo un bolonki.

Con el mayor, me llevo siete años y con el que me sigue… seis…, bastante diferencia de edades y ni que hablar con mis hermanos por parte de padre… que son los mas chicos.

De hermano mayor, podría decir, que hasta los veintitrés años no había mujer que no estuviera enamorada de el, era lo que podríamos decir, un modelo masculino… pero el tiempo paso…, y junto con el titulo de Dr. y su casamiento, volvieron los kilos de su infancia y preadolescencia, esa hermosa cabellera rubia por la que a tantas mujeres morían, desapareció por completo, esta ultima ya comenzó a desaparecer alrededor de los veinticinco… por eso entre los viejos conocidos se lo conoce con el apodo de “Chapa” (esto es porque se le volaron), hoy puedo decir que mi hermano no tiene un pelo de zonzo… pero tampoco de vivo…, baahhh… mejor dicho… no tiene un pelo.

Durante su colegio primario y secundario, siempre termino con todos los honores, abanderado, mejor promedio, asistencia perfecta, mejor alumno, etc., etc. Hoy en día, por actitudes, actos y dichos…, mi hermano mayor ya no integra lo que se podría denominar “mi familia”… es uno de los integrantes de mi familia que extirpe.

El que me sigue a mi, quien en su infancia se auto proclamara con el apodo de “Pimpín” y hoy conocido por muchos como “Negro”, es uno de los hermanos que me toco criar, con contextura física de la rama de mi madre, mas bien bajo y morrudo, es una onda percherón!! O sea, si nos ponemos uno al lado del otro… somos el día y la noche… con el he sido, compañero de facultad y de banco, una vez una profesora, luego de escucharnos hablar y referirnos, mutuamente, entre nosotros, como “hermano”, nos preguntó: “Uds. se conocen desde hace mucho?, porque siempre se llaman… hermano” mi respuesta fue: “Si…, nos conocemos desde su nacimiento, ya que soy su hermano”, la respuesta fue: “No… me están jodiendo… son totalmente distintos… tienen distintos apellidos, etc., etc.”, justo había coincidido, en que ambos estábamos con la partida de nacimiento encima, no recuerdo que tramite habíamos tenido que hacer en la mañana, y se las mostramos e hicimos referencia en que la persona que figuraba como madre, era la misma.

“Indio”, es el apodo de mi hermano adoptivo de mi madre y padrastro, es, junto con el “Negro”, el otro que me toco criar, con una deficiencia mental, causada por la desnutrición en sus primeros años de vida, llego a nuestra casa cuando tenia dos años y medio y con un peso de tres kilos, si hasta yo al nacer pesé mucho mas!!! con el tiempo no solo recupero el peso, si no que lo duplico, con un corazón enorme, mucho amor, y muchísima fuerza.

Por el lado de mi padre, tengo otros dos hermanos, nunca me toco convivir con ellos, pero siempre que podemos, nos vemos y pasamos horas de charla… de estos dos, el mas grande es Roque, quien estudia en La Plata… este le lleva dos años a Graciela, que a parte de ser la mas chica… es la única mujer, Graciela, esta estudiando dos carreras universitarias relacionado al arte escénico, a parte de dar clases en la misma facultad.

Tanto Roque como Graciela, son muy altos… yo, con mi 1,78mts de estatura, quedo realmente enano, y si… tienen a quien salir… con una madre de 1,92 y un padre de 1,82mts… enanos no podrían salir!!!!

Estos son mis hermanos…, todos desparramados por algún lugar de la republica…., quizás sin vernos y/o tener noticias del otro por algún tiempo… igualmente los quiero a todos por igual, aunque uno, conciente o inconsciente, siempre tiene alguna preferencias. No??

SEAL